El encuentro con las Dolomitas Leonesas y su perro guardián.
INTRODUCCIÓN
Para los de la parte oriental de la Cordillera Cantábrica el otro lado de la cordillera es menos conocido. Aunque he intentado remediarlo y conozco unas cuantas zonas de Asturias, Palencia y León.
Sigue sorprendiéndome cuando conozco zonas nuevas que atesoran pequeños tesoros y que no están masificados debido a su “cercanía” a los Picos de Europa. En este caso nos aproximamos a la Montaña Oriental Leonesa y en especial al valle de Arbas donde nos esperan tres cimas espectaculares llamadas las Tres Marías pero con nombre propio: Palero, Peña del medio y Los Corros.
MAPA
DISTANCIA
8,6 km
DESNIVEL
961,26 m.
DIFICULTAD
IBP: 112
DURACIÓN
6 h 23 min
LUGAR DE SALIDA
Casares de Arbas – 1327 m.
CIMAS
El Palero (1883 m.)
Peña del Medio (1913 m.)
Los Corros (1964 m.)
Peña Ortigal (1955 m.)
CLIMA
Sol y Calor
DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO
Dejamos el coche en Casares de Arbas, un pequeño pueblo del valle de Arbas que se sitúa entre el embalse y las cimas que hoy vamos a ascender. Dejando el coche en la plaza del pueblo junto a los columpios salimos en dirección Oeste por la carretera hacia Cubillas de Arbas.
Tras pasar la última casa de Casares de Arbas abandonamos la carretera por un camino a nuestra derecha. Dicho camino se encarama a un pequeño cordal de la ladera occidental del arroyo Casares que veremos por completo a la vuelta.
Iremos ascendiendo suavemente por un camino marcado que a medida que nos vamos acercando a las rocas se va difuminando e iremos ascendiendo cercanos al cordal pero buscando la traza más clara.
Un pequeño collado con una peña exenta del cordal nos indica el punto donde podemos dejar las mochilas para mejorar la progresión en la subida, a partir de aquí es un terreno de trepadas con buenos agarres pero donde hay que tener máximo cuidado.
Subiremos por las trazas de hierba entre las rocas paralelos a los cortados verticales de la vertiente norte. Sin acercarnos mucho a dichas paredes seguiremos ascendiendo por el terreno más amigable, a mitad de subida tenemos un punto crítico ya que hay una zona con pocos agarres y sin muchas opciones. Pero con tranquilidad iremos ascendiendo.
Poco después pasaremos entre dos grandes rocas en forma de pasillo. Este punto nos indica que se ha acabado la trepada, aunque no el riesgo, ya que la cima herbosa tiene buenas caídas hacia cualquiera de los lados.
Hemos llegado a la primera de las Tres Marías, El Palero, la más pequeña pero espectacular de las tres, aunque todavía no hemos visto su parte más salvaje. Desde la cima tenemos unas vistas que nos quitan el hipo:
Destacan el macizo de Peña Ubiña y la estación invernal Valgrande-Pajares con sus instalaciones.
El descenso hay que efectuarlo con sumo cuidado, tras pasar entre las rocas recomiendo ir echando el culo donde sea necesario y si lo vemos complicado darnos la vuelta y destrepar de cara a la pared. Lo que mejor podemos hacer es buscar el trazado correcto antes de dar el siguiente paso.
Regresamos al punto donde hemos dejado las mochilas, en ese mismo collado giramos a la derecha para bordear la ladera sur del Palero, no debemos bajar demasiado ya que todo lo que bajemos tendremos que subirlo.
El truco es bajar hasta donde dejemos de ver a nuestra altitud las paredes grises de roca caliza del Palero.
En ese punto llanearemos hasta tener a vista el collado entre el Palero y la Peña del Medio. Ascendemos en diagonal hasta dicho collado y una vez llegamos a nuestra derecha tenemos la pared vertical del Palero, un espectáculo de magnitud. Bajo mi punto de vista el lugar más increíble de esta ruta:
Se trata de un corte de estratos verticales que son los que conforman la cima del Palero, pero en este punto vemos dichos estratos con una longitud de unos 100 metros de altura.
Desde este collado con las paredes del Palero tras nosotros comenzamos a ascender el cordal hacia la Peña del Medio, la segunda de las Marías. Para ello tenemos que ascender buscando la parte herbosa.
Una vez bajo las peña de Peña del Medio tendremos que girar a la izquierda con objetivo de ascender en diagonal siguiendo la traza hasta un paso sencillo.
Una vez llegamos a dicho portillo, de fácil acceso giramos a nuestra derecha para trepar entre las rocas hasta las cercana Peña del Medio.
La cima tiene vistas similares, aunque se amplía la visión hacia Los Corros y sobre todo seguiremos viendo la espectacular forma del Palero:
Para continuar la ruta tendremos que seguir el cordal por el lado contrario al que hemos venido, en dirección a la María de Los Corros. Este tramo de cordal hasta el collado es una cresta sencilla y con un fácil destrepe junto al collado.
Una vez en el mismo tendremos que atacar por la derecha (vertiente norte) la cima de Los Corros. Para ello seguimos la traza que llanea hasta ponernos junto a la peña. Ascenderemos y tras unos zigzags en los que la alta hierba nos permitirá amarrarnos a la ladera, llegamos a una canal amplia y herbosa por la que subiremos zigzagueando sin descanso.
Esta cima se trata de la más alta de todas y por ello tendremos una panorámica mayor a las otras dos, llegando a ver Picos de Europa a lo lejos:
Seguiremos “llaneando” por el cordal, tramo más amigable por el que transitamos ahora y tras pasar una pequeña cota, vemos nuestro último objetivo, Peña Ortigal.
Descendemos al collado y por una pequeña y fácil canal por la derecha ascendemos a la cima de Peña Ortigal, popularmente conocida como Peña Esquina.
Aunque no es otra María las vistas son muy similares:
Volvemos al collado y sin traza clara descendemos por la ladera norte, buscando mientras bajamos algún hito. La ladera se va convirtiendo en un cordal que nos dirige al collado. A la izquierda tenemos el valle de Carrió y a la derecha el valle de Ortigal, por el que bajaremos.
Abandonamos el collado buscando la vaguada y el arroyo situado entre las pedreras de las Tres Marías y una ladera rojiza que vemos en la parte inferior.
Aunque parezca que no, este este valle es otro punto increíble de la ruta ya que veremos la fachada más impresionante de las Tres Marías mientras bajamos con las paredes verticales de las peñas.
Foto: Rutinas Varias
Una vez pasamos la pequeña loma rojiza llegaremos hasta el Refugio de las Tres Marías o refugio de la Llana Cimera (en el que pasamos la noche anterior). Desde este punto pasamos sin molestar entre el ganado vacuno y sin miedo del mastín (que nosotros llamamos Txemita).
La pista que encontramos nos llevará bordeando el arroyo de Casares hasta Casares de Arbas.
ITINERARIO FOTOGRÁFICO
FLORA Y FAUNA
Pues como anécdota la salida fue marcada por dos perros, la noche anterior a la ruta dormimos en el refugio de Llana Cimera y un mastín nos recibió y pasó la noche cerca de nosotros.
Por otra parte en el pueblo al inicio del día se nos juntó un perro enorme, Jesús Mari para nosotros, que se había escapado y nos “guió” durante toda la ruta, es el que veis en las fotos.
En cuanto a fauna salvaje, vimos aviones, chovas, rebecos o corzos, pero sobre todo nos encantó ver al quebrantahuesos.
De flora sabéis que soy casi nulo, pero mis compañeros estuvieron hablando de varias plantas.
CONCLUSIONES
Es una ruta que sin ser escalada, es muy técnica y aérea. No recomendada para gente sin experiencia en crestas y trepadas.
La cima del Palero es la más técnica de todas teniendo sobre todo que leer el terreno para ascender y descender sin meternos en ningún lio.
La Peña del Medio no tiene gran dificultad y en Los Corros si el terreno está húmedo hay que extremar las precauciones ya que es una ladera expuesta y herbosa que aun no teniendo dificultad puede acarrearnos un gran susto.
ENLACES
Track: Wikiloc
Otras crónicas: Rutinas Varias
Mendikat: Tres Marias
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