Reflexiones: Trampas para ciclistas

REFLEXIONES

Podríais pensar que hago escribiendo sobre ciclismo en este blog dedicado a montaña, y es que es algo que llevo pensando hace tiempo, el principal motivo es que esto nos implica a todos los que transitemos por la montaña, e incluso a los amigos y familiares nuestros.

Desde hace tiempo se vienen dando una serie de sucesos que dan verdadero miedo, y es que peligra nuestra integridad física e incluso nuestras vidas, debido a las Trampas para ciclistas

Hay demasiados ejemplos de este tipo de sucesos, unos con mayor gravedad que otros, estos son algunos de ellos:

  • Manuel Fernández, 57 años, un trozo de alambre de espino colgado entre dos árboles en Asturias que le produjo un corte profundo de la nariz a la comisura de la boca.
  • Diego, 38 años, una enorme piedra colocada en medio del camino le dejó parapléjico en el monte Alba de Valladares.
  • Borja Serantes, 8 años, quemaduras en la cara por culpa de un hilo de nylon puesto de lado a lado del camino a la altura del cuello.
  • Jesús Ángel Santos Redín, 43 años, muerto por un cable cruzado a la altura de la cadera en Valderredible.
  • Eugenio C. R., 49 años, herido en la boca por un cable atravesado en el camino en la dehesilla de Calamón, en Badajoz.
  • Joven de Elorrio, sufre un esguince en el hombro y diversos cortes y heridas, por un cable en Kanpazar.
trampas para ciclistas
Ciclista herido (Foto: Planeta Triatlon)

El caso más grave sin duda es el de Jesús Ángel Santos Redín, cuya muerte tuvo lugar en Valderredible por un cable situado en un camino, pero no un camino cualquiera de carácter privado, sino un camino muy transitado debido a que es un GR, el GR99

Pensando en el ámbito legal, en algunos de estos casos han llegado a imputar a varias personas (4 en el caso de Diego en Vigo, dos en el de Jesús en Valderredible) pero si se lee un poco sobre el tema, no hay una postura clara ya que unos dicen que no se puede considerar homicidio en grado de tentativa, pero si como lesiones imprudentes. Y en otros casos como Juan Carlos Aladro, Fiscal Jefe de Pontevedra, que opina que son delitos de homicidio doloso o incluso asesinato.

Por ello he creído conveniente preguntar a dos abogados que tengo el gusto de conocer y que nos dan su opinión profesional sobre el tema:

  • Alejando López (Abogado experto en Derecho Deportivo, de Montaña y actividades en el medio natural):

Deberían juzgarse como lesiones u homicidio en grado de tentativa, ya que lo hace pensando que va/puede matar a alguien.

  • Borja Callejo  (Abogado y asesor jurídico deportivo de Sportius):

Las trampas para ciclistas solo denotan el dolo y alevosía del que las coloca. Ya que la única intención del posible culpable es el de producir daño grave al que pasa por la mencionada trampa. Por tanto, debe ser tratado con la misma dureza que cualquier otro delito, según las daños que ocasione. En caso de muerte, debería considerarse asesinato, ya que concurriría alevosía, al tener el posible culpable conocimiento de  que el medio para cometer el asesinato es suficiente para asegurarse ese daño. En caso de producir lesiones físicas graves como suele ocurrir el responsable debería ser juzgado por un delito de lesiones con el agravante de alevosía. La problemática puede darse en el momento de la instrucción del procedimiento ya que será complicado encontrar al posible culpable. Sin embargo, si este se encuentra debería ser castigado con todo el peso de la ley, ya que es perfecto conocedor del daño que puede producir colocando esas trampas, con dolo y alevosía.

El asunto es tan grave y se está generalizando tanto que hasta la Guardia Civil se ha hecho eco del asunto y lo muestra en sus RRSS:

Por si sirve de algo, para que estéis atentos y si veis algún caso, no lo quitéis, sino llamad a las autoridades pertinentes, hay estos tipos de trampas conocidos:

  • Alambre de espino colocado entre dos árboles.
  • Piedra de grandes dimensiones en el camino.
  • Tablones de madera con pinchos clavados atravesados en el camino.
  • Palo en forma de lanza
  • Hilos de Nylon colocados entre dos árboles.

Os dejo con un vídeo de Valentí SanJuan sobre el tema:

Tras poneros en situación a los que no conocíais estos sucesos voy a dar mi opinión, que no es otra que para mí son intentos de homicidio, ya que la menor intención que se puede tener, es poner un alambre entre dos árboles, pero si este alambre está a una altura de más de 1,5 metros, no creo que sea para controlar al ganado…

Los propietarios o ganaderos pueden tener razón a la hora de decir que el monte tiene sus límites, pero esta no es la forma de decirlo, sino una simple valla o una señal bien puesta sirven para disuadir a la mayoría, y los pocos que se internen en estos sitios, pueden ser denunciados.

Y por último creo que no hay ninguna manera de excusar estos actos y el que entienda que sí, que vale más la pena una parcela que la vida de una persona, es un peligro en potencia.

Sin duda me quedo con esta frase:

“Hay trampas donde hay monte. Porque el monte está lleno de intereses”

Juan Torrado, presidente de Asciga (Asociación de Ciclistas Galegos).

Y recordad, si encontráis un caso:

  1. No os vayáis
  2. No lo toquéis, mováis, ni quitéis
  3. Llamad a las autoridades pertinentes (Guardia Civil, Seprona, Policía…)
  4. Y sobre todo….DENUNCIAD

¿Qué opináis sobre el tema? ¿Conocéis algún caso sobre esto? ¿Vale más una parcela que una vida humana?

Dejad vuestra opinión en los comentarios.

MAS INFORMACIÓN:

Noticias: El Pais, ABC, La Voz de Galicia, Faro de Vigo, Todo Mountainbike, IberoBike, ElCorreo, Huffingtonpost, Heraldo, Pontevedraviva, El Mundo, Granaventour

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