INTRODUCCIÓN
Hay veces, en el que la naturaleza, el ocio y la religión pueden conjugarse para dar tener un reducto particular esta unión la tenemos en la Isla de la Virgen del Mar.
Donde en poco más de 7 ha. tenemos una bonita ermita, rodeada de acantilados a la que podemos acceder a través de un puente sobre la playa de la Virgen del Mar.
Hoy la conoceremos tanto la Isla como su entorno, ¿Os animáis?
COMO LLEGAR
RECORRIDO
Nada más llegar a la zona, perteneciente a San Román de Llanilla, podremos dejar el coche en el aparcamiento que nos recibe antes de poder disfrutar de la zona y las vistas.
Una vez nos aproximamos al borde costero descubrimos todo el conjunto. Delante nuestro se encuentra la Isla de la Virgen del Mar, un pequeño islote de casi 8 ha., que queda unida periódicamente en bajamar por la arena de la playa.
Para salvar ese obstáculo se ha construido un puente que une la isla con tierra firme y al llegar nos recibe una pradera algo inclinada que precede a la edificación..
Dentro de la isla encontramos una Ermita del siglo XII dedicada a la Virgen del Mar, patrona de Santander desde 1980, y que cuenta con una romería en este enclave el lunes siguiente al domingo de Pentecostés. Dicha Ermita, al encontrarse en esta situación ha sufrido el envite del mar, algo que en ocasiones le ha costado su integridad.
Bajo el puente que une la isla, encontramos un arenal de color dorado que tiene unos 40 metros de ancho y 400 de largo, que siempre está a merced de las mareas, ya que cuando tenemos pleamar, la playa prácticamente desaparece debido a su forma alargada y encajonada entre los muros rocosos.
Es recomendable dar un paseo bordeando todos los acantilados de la isla para ver las pequeñas calas y recovecos, los cuales pueden llegar a los 30 metros, y posteriormente tomar dirección Sudoeste para dar un paseo costero por el inicio de la costa quebrada.
GALERIA
ENLACES
Virgen del Mar: Wikipedia, Tour Cantabria, El trastero de Palacio